Pho: la sopa vietnamita
Siempre he pensado que uno conoce realmente un país cuando prueba su comida y vive costumbres alrededor de la cocina. También creo que es posible al menos transportarse a otro país, así sea momentáneamente, gracias a un plato con los sabores de ese lugar. Lo ideal sería probar la comida y luego, a partir de esa experiencia, tratar de recrearlo en casa con los ingredientes adecuados. Pero no siempre se puede ir a Vietnam cuando te provoca probar su sopa más famosa, pho, por ejemplo. Así que lo que queda es leer mucho, investigar, buscar posibles sustitutos y tratar de hacerlo de la manera más tradicional posible. El resultado es una idea de lo que puede ser estar en ese lugar y el escape de los sabores que nos rodean diariamente. Eso quise lograr con esta sopa. Claro, yo estoy en Venezuela y hacerlo completamente tradicional no fue posible, pero creo que me acerqué bastante. Este plato gira en torno al caldo de carne y especias, lo demás son los adornos, así que hay que ponerle especial atención y dedicación a este primer paso. Después disfrutarlo, y si sobra por favor probarlo al día siguiente, porque este caldo solo se pone mejor y mejor con el tiempo.
Pho
Fuentes: Viet World Kitchen y The Kitchn
Ingredientes:
Para el caldo
2 cebollas
1 trozo de jengibre
2kg de huesos de carne para sopa (tuétano y nudillo)
5 estrellas de anís
6 clavos
1 rama de canela
4 cucharadas de salsa de pescado
Sal al gusto
1 cucharada de azúcar
Para servir
1 paquete de fideos de arroz
200g de lomito fileteado (o pollo)
3 cebollines picados
1 chile o jalapeño
2 rodajas de limón
1 taza de brotes de soya
1 taza de hierbas (cilantro, albahaca, menta)
Sriracha
Salsa Hoisin
Aceite de chili
Preparación:
Rostiza las cebollas y el jengibre sobre una estufa, en la parrilla o en el horno en broil. Deja la piel quemar durante unos 15 minutos. Deja enfriar y quita la piel quemada.
En una olla grande con suficiente agua coloca los huesos y llévalo a un hervor. Hierve por 20 minutos, cuela y lava bien los huesos. Rostiza los huesos por 15-20 minutos y llévalos de nuevo a la olla limpia, cubre con agua y cocina por 30 minutos. Agrega el resto de los ingredientes y déjalo en un hervor suave durante al menos dos horas, pero idealmente de 6 a 8 horas. Retira los huesos y deja el caldo hervir durante una hora más. Pasa el caldo por un colador para descartar las especias y ajusta la sazón si hace falta.
Cocina el pollo previamente sazonado con sal y pimienta o para una versión más tradicional, rebana la carne muy delgadita y déjala cruda. Colócala en el bowl donde vas a servir. Cocina los fideos como indique el empaque y sírvelos en los bowls a un lado de la carne. Agrega el caldo caliente y el resto de los toppings junto con el pollo. Sirve con las salsas a un lado.